Disfrutar del golf en un entorno natural envidiable, con unas vistas espectaculares a la montaña y al mar que permiten divisar el Peñón de Gibraltar y la costa de Marruecos, y además jugar sin prisas, relajado, sin el agobio de otros jugadores que nos vengan pisando los talones, un privilegio que se da, por desgracia, en escasísimos campos... Todo esto y mucho más es lo que ofrece el Marbella Club Golf Resort.

El diseñador del campo, Dave Thomas, fallecido en 2013, fue elegido especialmente por el Marbella Club para realizar el trazado. Como jugador, llegó a los play-off de dos Open y fue un miembro habitual del equipo de la Ryder Cup. Su firma como diseñador y arquitecto de campos de golf puede hallarse en más de 100 campos de todo el mundo. Posiblemente, su obra más conocida sea la asociada con el campo Nacional PGA y The Belfry. Dave Thomas aceptó encantado colaborar con el Marbella Club Hotel. "La oportunidad de diseñar y supervisar la construcción de este campo, manteniendo la tradición y el prestigio del Marbella Club, era totalmente irresistible. El campo será uno de los mejores campos de golf en Marbella y España", dijo en su día.

El pintoresco hoyo 1 es el botón de muestra de la calidad del diseño del campo, con sus preciosas y contorneadas calles, los greens inmaculados, marca el comienzo de un campo de golf memorable. Los 18 hoyos se extienden a lo largo de 6.000 metros con obstáculos de agua y búnkeres exigentes, una característica del diseñador de campos, animando así a los jugadores a buscar el golpe más ventajoso. Se ha utilizado hierba Bermuda 419 en las calles y tees, una combinación de tres hierbas en los ante greens, y una nueva variedad de hierba americana en los greens. El sistema de riego controlado por ordenador, junto con los últimos avances en las técnicas de formación y diseño de calles hacen que el campo se mantenga en condiciones impecables todo el año.

Los primeros nueve hoyos ofrecen la experiencia única de tres pares 5 consecutivos, que no sólo son una difícil prueba al comienzo del juego, sino que brindan algunas de las vistas más bellas del recorrido. El tee del hoyo 7 es también el punto más alto del campo y ofrece una vista panorámica de la costa, Gibraltar y hasta África. Extendiéndose a lo large de 6.000 metros, combinando su extensión con la colocación estratégica de búnkeres y obstáculos de agua e intrigantes diseños de los green, el campo, par 73, culmina en uno de los últimos hoyos más impresionantes de Europa. Una de las diversas salidas en alto, este par 5 cuyo green alcanzan algunos profesionales en dos golpes, es un hoyo final memorable.

 

Casa Club

Enclavado entre las montañas de Benahavís, a unos 20 minutos en coche desde el centro de Marbella, en este campo los golfistas reciben el trato de alta calidad que cabe esperar de un resort de golf de cinco estrellas. Por ejemplo, el personal coloca los palos en los buggies sin el estrés habitual relacionado con los clubes más comerciales.

La casa club es un exquisito "cottage" o casita de campo con techo de paja y unas vistas privilegiadas del campo de golf y el lago del hoyo 1.

En los días más frescos, la chimenea y sus muebles rústicos evocan la atmósfera de un refugio de caza manteniendo las tradiciones aristocráticas del Marbella Club.

Por lo que respecta a la tienda, cuenta con una amplia gama de productos de marca de la mejor calidad. Nike, Bobby Jones, Callaway, Footjoy, Titleist, son algunas de las firmas que trabajamos, además de una cuidada selección de prendas "The Marbella Club Golf Resort" con el logo inconfundible de los profesionales del Club de Golf Marbella Club, con el escudo de armas original de la familia Hohenlohe.

 

“Un gran trabajo”

El director del campo, Rod Bastard, se muestra muy orgulloso del diseño realizado por Dave Thomas: “Hizo aquí un gran trabajo y, de un terreno precioso pero complicado, sacó un gran campo, muy jugable para cualquier handicap y con unas vistas espectaculares. Todas las bolas botan hacia las calles, todos los greenes reciben bien y las calles están bien aisladas y rodeadas de naturaleza”.

Destaca Bastard por supuesto el hoyo 18, por sus espectaculares vistas sobre Gibraltar, y resalta asimismo los hoyos 7 y 13, también pares 5, “que te dan opciones de jugar seguro, tranquilo, pero también agresivo si quieres”, y el hoyo 9, un par 3 cuesta abajo con un riachuelo. “La verdad es que el campo tiene mucha variedad y divierte al jugador”, apostilla.

También resalta la tranquilidad que se respira en el campo. “Aquí tienes la sensación de relax, de comodidad y de que estás jugando prácticamente solo”.

El número máximo de jugadores admitidos al día es de unos 70, “cuando otros campos están poniendo 180 o 200”, enfatiza. “No tiene nada que ver salidas cada doce minutos y compartir el campo con 60 o 70 jugadores: es todo un lujo”, concluye.