Montenmedio Golf & Country ClubEn una maravillosa soleada mañana de octubre decidí cambiar los a veces agobiantes aires de la Costa del Sol por los más tranquilos de Montenmedio Golf & Country Club, en el interior de la provincia de Cádiz. Opté por la carretera de la costa en vez de la más rápida autovía del interior y disfruté del viaje por Tarifa, por las ‘granjas de viento’ (las de los grandes molinos que generan electricidad) y luego por las serpenteantes carreteras que se alejan del litoral. Las vistas del mar y de la costa africana eran fantásticas, mientras que al lado opuesto de la carretera había un bonito paisaje de montaña. Gracias a las grandes mejoras de la carretera de la costa durante los últimos años, Montenmedio está ahora a sólo un par de horas en coche desde Fuengirola, en el corazón de la Costa del Sol

Una de las primeras cosas que llama la atención al llegar a este club es la ausencia de casas y el disfrute de la naturaleza en todo su esplendor, ya que hay bosque por doquier. En la inmensa finca de Montenmedio destaca una llamativa edificación de color amarillo, que alberga la tienda, el caddie master y un coqueto bar bellamente decorado y en cuyas paredes cuelgan pinturas del siglo XVIII.
Estaba tomándome un café, cuando me vino a saludar el director del campo, Miguel Marín, quien posteriormente me presentó al profesional del club Nacho Gutiérrez.

Tras conocer mis problemas de yips en los pitchings, se ofreció amablemente a tratar de resolverlos, pero, convencido de que la era de los milagros no ha llegado aún, decliné amablemente su oferta y me dirigí al campo de golf.

Montenmedio Golf & Country Club

El primer hoyo de Montenmedio nos proporciona una buena idea del reto que se nos avecina en todo el recorrido. La calle baja suavemente, cae de derecha a izquierda y hay dos búnkeres estratégicamente situados a unos 200 metros del tee. El green, en forma de círculo, está bien protegido por obstáculos de arena. El pueblo blanco de Vejer de la Frontera, en lo alto de una colina en la distancia, parece estar divisando la escena.
El relativamente corto hoyo 2 (281 metros desde amarillas) se juega a través de un profundo valle a una calle que se eleva considerablemente. Un río fluye a lo largo del valle, mientras que los bunkers acechan a ambos lados del approach a green. La hierba frontal del búnker que protege por delante al green es excepcionalmente alta, pero afortunadamente hay zonas de escape en la parte posterior, por lo que la opción más segura es pegar sin miedo.


El 3 es un par 5 de 436 metros que se juega desde un tee elevado a una calle que desciende hacia un valle, desde donde gira a la derecha y comienza una fuerte subida. A 110 metros del green, a la izquierda, hay una serie de seis bunkers, mientras que el green, amplio, está prácticamente rodeado por más arena.
Montenmedio Golf & Country Club

El 4 es el primero de cuatro hoyos del campo que requieren un cierto grado de fe ciega. Ocho escalones de piedra conducen al tee, desde donde la vista es simplemente de una colina con un indicador en su cenit, mientras que todo alrededor es un denso bosque. No hay otra opción que golpear la bola por encima del indicador y esperar lo mejor. Hay mucho espacio a la derecha, pero un hook mandará la bola contra una valla perimetral. A un centenar de metros, la calle gira suavemente hacia la izquierda y hacia abajo antes de ascender de nuevo hacia otro green circular fuertemente protegido por bunkers a ambos lados.


El 5, par 5, se juega en una calle muy generosa con numerosos árboles a la derecha. A la altura del marcador de 200 metros, la calle desciende hasta una hondonada y luego asciende de nuevo hasta un green de dos niveles con una fuerte inclinación de derecha a izquierda.

A pesar de que el 6, par 4 de 320 metros, es otro hoyo ciego, hay un montón de sitio sobre la colina. El mayor peligro radica en la amplia zona de arena que protege por la derecha la primera mitad del green.

El 7 es un par 3 de 137 metros que tiene cuatro búnkeres y barras rojas rodeando un gran green con dos niveles. Así que, a pesar de que por su medida es poco más que un hoyo de pitch and put, la elección del palo es fundamental. Palmeras y olivos, junto con las coloristas flores que rodean la plataforma de salida, hacen que este hoyo sea muy vistoso.Montenmedio Golf & Country Club
El 8, par 4 de 275 metros, se juega a un valle poco profundo, y en la marca de 100 metros de la calle dibuja un brusco dog-leg a la izquierda hasta llegar a un green elevado rodeado de pequeños árboles y arbustos.

El 9 mide 335 metros y tiene arbustos densos a ambos lados, mientras que en la calle hay árboles dispuestos al azar. El green, con bunkers a ambos lados, está además muy bien resguardado por más árboles.


El 10 es un par 4 de 361 metros que destaca por su magnífico diseño. Un calle generosa invita a pegar con ganas, y mientras no se haga hook todo irá bien. La calle se estecha a unos 40 metros del green mediante un peculiar búnker, de cuya arena emergen tres palmeras y cuya silueta está realizada con traviesas ferroviarias. Tras el green, hay un lago que brilla bajo el sol matutino. Es un hoyo realmente memorable.


El trazado del 11 discurre en dirección contraria al anterior y es un par 5 de 444 metros. Se juega desde un tee elevado hacia un valle en cuyo fondo nos aguarda un estanque. Desde esa potencial tumba acuática, la calle asciende hacia un green estrecho y no muy largo, que está protegido por árboles a su izquierda. También hay que evitar un approach errático por el lado contrario, ya que la bola caerá en lugares muy incómodos.
Montenmedio Golf & Country ClubCon 511 metros, el 12 es el hoyo más largo del campo, aunque desde el tee la única vista es la cima de una colina con un marcador encima a unos 100 metros de distancia. Hay mucha calle por delante, así que es mejor darle sin remilgos a la bola. El green, ligeramente elevado, está precedido por una avenida de árboles y presenta una caída de derecha a izquierda.


El peligro principal del 13, par 3 de 180 metros, es el denso follaje a la izquierda y en la parte posterior del green.


Las palmeras, el bosque y las montañas que se divisan al fondo hacen del 14 un hoyo visualmente muy atractivo. En el marcador de 170 metros, la calle gira bruscamente a la derecha, pasa bunkers a ambos lados y acaba en un green elevado que tiene un mar de arena a la izquierda y un poco menos en el lado opuesto. Otro gran hoyo que bien merece su índice 1 en el recorrido.Montenmedio Golf & Country Club


El 15 se juega sobre una calle que serpentea hacia arriba y hacia abajo hasta que llega al green. Un olivo, la arena y el green añaden dificultad al golpe desde el bunker. Cinco palmeras llaman elegantemente la atención detrás del green, que tiene más sutiles ondulaciones que muchos de sus predecesores.


El 16, un muy bonito par 3 de 177 metros, se juega por un valle poco profundo a un green que se inclina de izquierda a derecha y tiene árboles en la parte frontal derecha y bunkers a la izquierda.


El 17 es otro hoyo ciego que se juega sobre una colina hacia una calle inclinada claramente de izquierda a derecha. Desde una pequeña plataforma en lo alto de la colina, la calle se precipita hacia un valle, en cuyo lado izquierdo hay un bunker con forma de herradura con unas paredes muy empinadas que es mejor evitar. La calle luego asciende hasta el green, que tiene dos niveles y es ancho por delante y estrecho en la parte posterior.


El recorrido en este oasis de la paz lo cierra el hoyo 18, un par 3 que mide 153 metros y que se juega a través de una avenida de árboles sobre un green resguardado en su frontal derecho por un búnker en forma de ese. Hay que tener cuidado de no hacer hook ni excederse en la pegada si uno quiere salvar con éxito este último trámite del recorrido.


Después de una ducha en los cómodos y bien equipados vestuarios, volví al bar para retomar fuerzas. Luego el director me enseñó un salón con sofás, un escritorio antiguo y más cuadros. Parece que Maite, la esposa del propietario de Montenmedio, es una gran experta en antigüedades, y su marido, Antonio Blázquez, es feliz permitiéndole demostrar esa maestría con la decoración del club. Una acertadísima decisión que ha dado como resultado una casa club realmente única.

Así llegó a su fin un agradable e interesante día en Montenmedio Golf & Country Club, un verdadero oasis de tranquilidad y un agradable paréntesis entre las muy rápidamente desarrolladas áreas costeras que se extienden al este y al oeste de este remanso de paz. ¡Que se mantenga así por mucho tiempo!

Montenmedio Golf & Country Club