Ryder Cup, Copas del Mundo, Volvo Masters, Mundiales Match Play, Series Mundiales, Open de España, Andalucía Masters, Seniors Match Play... Andalucía ha sido, desde 1966, sede de los muchos de los mejores torneos del mundo. Nicklaus, Tiger, Faldo, Langer, Sergio, Jiménez, Montgomerie, Lyle, Woosnam, Harrington, Rose, Westwood y Poulter son sólo unas de las estrellas que han triunfado en alguno de los más de 70 grandes torneos profesionales jugados en esta tierra desde hace casi medio siglo.
Convertirse en uno de los destinos líderes del mundo en turismo de golf no es fruto de la casualidad ni se debe únicamente a la bendición de disfrutar de un clima excepcional y de una gran oferta de campos de golf, muchos de ellos de extraordinaria calidad. La visibilidad y consolidación de un destino turístico de este tipo tiene también mucho que ver –y cada vez más en los últimos años– con su proyección mediática, y eso se consigue principalmente con la atracción de los grandes golfistas internacionales gracias a la disputa de torneos de relieve. Andalucía lleva casi medio siglo albergando prestigiosas competiciones de profesionales, muchas de las cuales han atraído a los mejores jugadores del mundo. Jack Nicklaus, Gary Player, Greg Norman, Seve, Tiger, Olazábal... la lista sería casi interminable. Ryder Cup, Campeonatos Mundiales Amex, Copas del Mundo, Volvo Masters, Mundiales Match Play, Open de España... Torneos oficiales de los Circuitos Europeo y Norteamericano, del Senior y Challenge European Tour... Los mejores espectáculos golfísticos del mundo se han escenificado en Andalucía.
El ‘baile’ andaluz de los torneos internacionales lo abrió, en 1966, uno de los mejores escenarios posibles en nuestro país: el Real Club de Golf de Sotogrande. Fue con motivo del Open de España, que se saldó con el triunfo de Roberto de Vicenzo. Se impuso, con 279 golpes, al inglés Bernard Hunt. El gran jugador argentino era una gran figura en aquella época, y rubricó su inmensa talla deportiva el año siguiente cuando, con 44 años, se convirtió en el jugador más longevo en ganar el Open Británico, y hacerlo además tras un apasionante duelo con nada más y nada menos que Jack Nicklaus y Gary Player.
Estos dos míticos jugadores –el Oso Dorado y el Caballero Negro– se vieron las caras en otro duelo disputado también en suelo andaluz unos años más tarde, en la Copa del Mundo de 1973 en Las Brisas, un magnífico campo diseñado por el norteamericano Robert Trent Jones senior. Este campo marbellí había albergado en 1970 el Open de España, ganado por el que ahora es vicepresidente del Circuito Europeo, Ángel Gallardo, que se impuso al inglés Neil Coles. En aquel Open el mejor amateur fue el que luego se convertiría en uno de los grandes diseñadores de campos de golf de España, José Gancedo.
Volviendo al duelo entre Nicklaus y Player en Las Brisas, el gato al agua se lo llevó finalmente el norteamericano, que formaba equipo con Johnny Miller. Los estadounidenses se impusieron a los sudafricanos Player y Hugh Baiocchi por dos golpes (558-560). El campeón individual de esa Copa del Mundo fue Miller, con 277 golpes.
Pasarían seis años hasta que Andalucía acogiese otra competición internacional de profesionales, de nuevo el Open de España, esta vez en el campo de Torrequebrada, en Benalmádena y diseñado por Gancedo. Este torneo formaba ya parte del Circuito Europeo, que se había constituido el año anterior y que se había inaugurado precisamente con el Open de España, en el Club de Golf de Pals (Gerona), con victoria de Antonio Garrido, que se convirtió así en el primer ganador del Tour.
En Torrequebrada en 1979, ya con la Democracia recuperada en España, ganó el sudafricano Dale Hayes. Se embolsó los 8.104 euros del triunfo (entonces su equivalencia en pesetas) de los 48.593 que repartió en premios el torneo. Esta dotación económica suponía una gran subida con respecto al Open de España del año anterior, ya que Garrido se había llevado sólo el equivalente a 2.000 euros (sobre un fondo de 14.000 para premios).
El Open de España, el torneo profesional internacional más veces disputado en Andalucía (10) después del Volvo Masters (21), regresaba a esta región en 1983 y 1987, en ambos casos a Las Brisas. Ganó en el 83 el irlandés Eamonn Darcy, que superó a Manuel Piñero por un solo golpe, y en el 87 se impuso Nick Faldo, con dos golpes de ventaja sobre Seve y Hugh Baiocchi.
En 1988, con la creación del Volvo Masters, saltaba a la palestra internacional un campo que desde el primer momento daría mucho que hablar: Valderrama. El recorrido diseñado por Robert Trent Jones senior había sido adquirido años antes por Jaime Ortiz Patiño, una de las personas que más hizo por la proyección del golf de Andalucía. Nacía el torneo con una gran ambición, ya que era el que ponía el punto final a la temporada del Circuito Europeo, el acceso estaba limitado sólo a medio centenar de jugadores –los mejor clasificados en la lista de ganancias u Orden de Mérito–, repartía mucho dinero en premios y podía ser decisivo para la proclamación del número uno del añ, como así fue de hecho la mayoría de las veces. El cóctel, con esos ingredientes, era explosivo, y el éxito fue su consecuencia natural, con un Valderrama atestado con miles de aficionados disfrutando de un formidable espectáculo, que tuvo su punto álgido en el duelo final entre dos de los más grandes jugadores europeos de todos los tiempos: Faldo y Seve. El inglés, que entonces no tenía el título de Sir, izó el primer trofeo del Volvo Masters gracias a sus 284 golpes, dos menos que el español. Sólo ellos dos conseguían terminar bajo par (-4 y -2) en el ya entoces temible Valderrama. Faldo se embolsó 123.662 de los 492.366 euros que repartió en premios el torneo. El tercer clasificado fue otro histórico, y otro de los europeos que han ganado algún título del Grand Slam, el escocés Sandy Lyle, que pegó un total de 288 golpes.
Se iniciaba tan brillantemente la historia del más prolífico torneo del Circuito Europeo que se disputaría en Andalucía y que hasta su undécima edición, en 1999 en Montecastillo (Jerez) no vería coronarse al único campeón español del Volvo Masters en sus 21 años de historia: Miguel Ángel Jiménez. Ese penúltimo año del siglo XX fue uno de los mejores, deportivamente hablando, del dicharachero jugador malagueño, que fue profeta en su tierra y a punto estuvo de derrotar al mismísimo Tiger Woods en el Campeonato del Mundo American Express en Valderrama. Jiménez, que meses antes, ese mismo año, había ganado en el Parador Málaga del Golf (antes Club de Campo de Málaga) el Turespaña Masters, sólo sucumbió ante el número uno del mundo en el play-off. Miguel Ángel sumó esa temporada once top-10, incluidas las dos citadas victorias y dos segundos puestos. Terminó la temporada en el cuarto puesto de la lista de ganancias del Circuito Europeo, con un total de 1.148.290 euros. Su mejor actuación en el Grand Slam de ese año fue décimo en el US PGA Championship.
Jiménez fue el único español en ganar el Volvo Masters, pero hubo otros compatriotas que estuvieron muy cerca de la victoria en ese prestigioso torneo, sobre todo Sergio García, que quedó segundo en 2004 en Valderrama tras caer en el play-off ante el inglés Ian Poulter, y al año siguiente, también segundo, esta vez a dos golpes del ganador, el irlandés Paul McIngley. Aunque no fue en ese torneo, Valderrama por fin se rindió a los pies del castellonense con una victoria, en el Andalucía Masters de 2011, escenario de un gran duelo hispano hasta el último hoyo entre Sergio y Jiménez, que perdió por un golpe. Otro español que estuvo muy cerca del triunfo en el Volvo Masters fue Carlos Rodiles, que sucumbió en el desempate final ante el sueco Fredrik Jacobson en 2003 en Valderrama.
Y si el Volvo Masters fue un hito importantísimo para el golf en Andalucía, la Ryder Cup de 1997 fue el summum. Gracias a Jaime Ortiz-Patiño, España consiguió ser el primer escenario europeo fuera de las Islas Británicas en acoger una Ryder Cup. Valderrama se mostró como nunca al mundo y Seve capitaneó a Europa hacia la victoria. La escuadra de Tom Kite, con figuras por ejemplo de la talla de Tiger Woods, Fred Couples, Phil Mickelson, Mark O’Meara o Justin Leonard, perdió por un solo punto ante el equipo en el que formaban, entre otros, José María Olazábal, Bernhard Langer, Nick Faldo, Colin Montgomerie y Darren Clarke.
En los más de 70 torneos del Circuito Europeo, incluidas las finales de la Escuela de Clasificación para obtener la tarjeta del Tour, sólo se han producido seis victorias españolas: Gallardo, Jiménez (2), Carlos Rodiles (Escuela de Clasificación de 2006 en San Roque Club), Álvaro Quirós (Open de España de 2010 en el Real Club de Golf de Sevilla) y García. En segundos puestos hemos sido más prolíficos, con catorce puestos individuales y uno por equipos (Copa del Mundo de 2004 en el RCG de Sevilla, que ganó Inglaterra). Seve se sitúa en cabeza de este ranking de secundarios o segundones, con tres segundos puestos: Open de España 1987, Volvo Masters 1988 y Volvo Masters 1994. García y Jiménez atesoran cada uno dos segundos puestos, que sería tres en caso de contar la citada Copa del Mundo de 2004, ya que ambos fueron los representantes de España. Manuel Piñero, Olazábal, Miguel Ángel Martín, Carlos Rodiles, Ignacio Garrido, Alejandro Cañizares, Pablo Larrázabal y Tania Elósegui completan el elenco de secundarios de lujo en los grandes torneos disputados en Andalucía.
Frente a la apabullante presencia de competiciones masculinas, en la región sólo se han jugado tres del Circuito Europeo Femenino, el Ladies European Tour (LET). El primero se disputó en Los Naranjos en 1988 y fue el Marbella Ladies Open, primer torneo del LET en España. Se saldó con el triunfo de la sudafricana Laurette Maritz, que se impuso con 283 golpes. el en ambos casos el Open de España Femenino. Ya en 2010 el Open de Esepaña Femenino tuvo como escenario el campo de Flamingos y ganó una golfista mítica en el panorama internacional, la inglesa Laura Davies; mientras que el Open de España de 2011 se disputó en La Quinta y registró la victoria de la también inglesa Melissa Reid, compatiendo Elósegui la segunda plaza con otras dos jugadoras.
El Circuito Europeo Senior ha tenido mayor presencia en Andalucía, con su epicentro de nuevo en la Costa del Sol. El primer anfitrión fue, en 2002, Flamingos Golf, con el Seniors Match Play, que ganó el jamaicano Delroy Cambridge. En 2004 repetiría torneo el resort donde se alojó Michelle Obama y una de sus hijas, y en esta ocasión el triunfo recayó en el inglés Carl Mason. Tras un paréntesis de cuatro años, en 2009 retornaba el Circuito Europeo Senior a Andalucía, gracias sobre todo al apoyo de un Ayuntamiento, el de Benahavís, segundo municipio costasoleño en número de campos de golf, despúes de su vecino Marbella. El Benahavís Senior Masters se disputó en La Quinta y se saldó con victoria de Carl Mason, que ganó en el desempate frente a Gordon Brand junior. Este torneo volvería a dirimirse en el mismo campo los tres años siguientes, y Mason se anotó uno de los triunfos.