En 1968 José Banús, promotor del famoso puerto deportivo que lleva su nombre, fundó el Real Club de Golf Las Brisas, aunque entonces fue bautizado como Club de Golf Nueva Andalucía. El propio Banús encargó al que ya era considerado como uno de los mejores arquitectos del mundo, Robert Trent Jones, el diseño de este mítico campo marbellí que ha sido escenario de grandes competiciones y que en su recorrido alberga un verdadero jardín botánico con plantas exóticas de todos los continentes.

Con algo más de 1.200 socios, de más de 30 nacionalidades, el Real Club Club de Golf Las Brisas aspira a ser considerado como el club privado por excelencia para aquellos que saben apreciar un excepcional recorrido, un ambiente social sumamente acogedor y cosmopolita con un servicio excelente y unas instalaciones perfectamente mantenidas.

Pero como el tiempo pasa para todos, también este campo necesitaba actualizarse después de 45 años.

Para hacer las reformas necesarias, en profundidad aunque respetando la obra de su creador, se eligió al prestigioso arquitecto Kyle Phillips, uno de los discípulos predilectos de Robert Trent Jones y garantía de que el espíritu del diseño original sería mantenido.

Se han reformado los primeros nueve hoyos, que se abrieron al juego hace unos meses, y la renovación de los nueve siguientes se hará próximamente, comenzando a principios de 2014.

Paul Muñoz, director del club, nos explica con detalle lo que se ha hecho en esta primera vuelta.

“El campo, lógicamente, necesitaba ya reparar drenajes, greenes, tees, etc. Había que hacer retoques técnicos y, ya puestos, pensamos que algunas adaptaciones de diseño no vendrían mal”, explica.

”La tecnología del material de hoyo para el juego”, prosigue, “ha dejado obsoletas por ejemplo las distancias que eran habituales en los años 60”.

“Con la reforma que se ha hecho del hoyo 1”, continúa Muñoz, “ se han ganado unos metros y se ha hecho mas visible el bunker del fairway para las distancias medias actuales. El diseño no ha cambiado mucho“.

“En el hoyo 2 hemos añadido un tee de profesionales, muy atrás, y hemos realineado todos los tees con la calle, porque antes todos apuntaban al lado derecho y ahora lo hacen al centro. También los bunkers del fairway se han resituado a la distancia media de driver actual, y se ha añadido un pequeño bunker junto al arroyo para que cace bolas y no se pierdan. El green lo hemos bajado casi 90 centímetros, lo que lo hace visible ahora para el segundo golpe”, señala el director del club.

Respecto al hoyo 3, dice que antes de la reforma, era un par 5 por tan sólo un metro. “Ahora hemos acercado el green al agua, perdiendo ese metro, lo que nos ha permitido convertirlo en un par 4, lo que hace al hoyo un poco o bastante más atractivo”, apunta Muñoz.

En el hoyo 4 también se han resituado los tees, que estaban unos metros a la izquierda con respecto a los de ahora. “Están ya mucho más en línea con la calle, y esto hace que menos probable irse fuera de límites a la derecha”, explica.

En el 5 se ha añadido un tee de profesionales y ensanchado “muchísimo” la calle por la izquierda, añadiendo además unos bunkers a la derecha para evitar que se intente acortar el dog-leg por encima de las casas, y a la vez el fuera de límites por ese lado. “Hemos resituado todos los bunkers y cambiado el moldeo del green, que aguanta mejor las bolas que antes”, indica Muñoz.

En el 6 también se ha añadido un tee más atrás, un bunker cazabolas junto al arroyo, y se ha retirado todo el muro de madera que sostenía el green, haciendo que la pendiente caiga de forma natural hacia el agua.

En el 7 se ha rebajado el green en casi dos metros de altura, “lo hemos movido a la izquierda y rebajado 1,90metros en altura, acercándolo mucho más al agua, haciendo que la superficie del green sea casi visible, ya que antes no era visible”, explica el director del Real Club de Golf Las Brisas.

En el hoyo 8 se ha resituado el bunker de la izquierda del fairway y se han añadido algunos más, tanto para guiar a los profesionales como para evitar que los que tienen un handicap más alto pierdan bolas en el arroyo. “El green lo hemos situado más cerca del agua para dar una sensación, como en Augusta, de que si te quedas corto te rodará la bola hasta el agua”, dice Muñoz.

El hoyo 9 ha retrocedido totalmente para alejarse un poco de la casa club. “Así se evita la sensación de claustrofobia que había por estar encajonado junto al proshop y el edificio central del club. Esto nos ha permitido añadir un putting-green junto a la casa club, lo que la hace más atractiva”, comenta.

“Además de estos retoques en el diseño”, añade Muñoz, “hemos renovado todo: drenajes, sistemas de riego, tees, greenes, calles, etc. En fin, ha sido una reforma en profundidad que nos ha dejado muy satisfechos”.

“Cada retoque que ha hecho Kyle Phillips ha sido una mejora inmensa que es apreciada por todos los jugadores. Ahora hay más reto, pero los hoyos son más divertidos y mucho más atractivos que antes”, asegura el director del club marbellí.

“Nuestros socios están muy satisfechos de las reformas que se han realizado”, concluye Muñoz.

Los trabajos para rehacer los nueve últimos hoyos del recorrido comenzarán a principios de 2014 y acabarán en el ultimo tercio del año.

Fotos: Paul Muñoz con Kyle Phillips, e imágenes de Las Brisas.