El Open de Estados Unidos, segundo grande de la temporada, siempre depara alguna sorpresa en su fase de preclasificación. Si hace poco era una niña de 10 años la que intentaba, sin éxito, pasar la criba para obtener una plaza en el major y convertirse en la participante más joven en la historia del torneo, ahora es un chico de 15 años el que va a hacer su sueño realidad. El estadounidense Cole Hammer es el nombre del muchacho, que logró la hazaña clasificatoria en Dallas, Texas, gracias a sendas rondas de 64 y 68 golpes.

Hammer (martillo, en inglés) es uno de los trece amateurs que competirán en el US Open dentro de unos días. Es el número más alto de amateurs en juego desde la edición de 2009.

"Esto significa un mundo para mí", dijo Hammer al Dallas Morning News. "He soñado con esto toda mi vida. Va a ser impresionante. Esto me da mucha confianza. Yo venía con el pensamiento de que esto me venía un poco grande, pero ¿por qué no? Daré lo mejor de mí”.