“SÉ QUE ESTO ES DIFÍCIL, LARGO Y QUE HAY QUE SEGUIR TRABAJANDO”

Cuando se le ve venir, su forma de caminar, sus gestos, su manera de estar en el campo recuerdan a su padre. Ya en la distancia corta, esa impresión aumenta porque su tono de voz se asemeja mucho, incluso sus giros y expresiones.

Javier  Ballesteros, el primogénito del inigualable Seve, ha debutado como golfista profesional. Lo ha hecho en la Costa del Sol, en La Cala Resort, y su primer intento de acceso al Alps Tour, el tercer circuito en importancia del Viejo Continente tras el Europeo y el Challenge, ha resultado infructuoso. No superó la primera fase de la Escuela de Clasificación.

–¿Cómo ha sido la experiencia en tu debut como profesional?

–Como amateur ya había jugado torneos importantes. Este debut no ha ido muy bien. La verdad es que estoy haciendo algunos cambios en el swing, venía entrenando bastante bien, pero no me han acabado de salir las cosas.

He ido un poco como con falta de confianza, y bueno… no he jugado mal, pero tampoco bien. Contento no estoy, porque no se puede estar satisfecho cuando se hacen rondas sobre par y no salen las cosas como uno quiere. Poco a poco, yo sé que que esto es difícil, largo y que hay que seguir trabajando.

–¿Qué destacarías de tu juego?

–Suelo tener un juego corto muy bueno, la verdad. De 95 o 100 metros para abajo, alrededor del green y en búnker, soy un jugador muy fino.

–¿Y lo peor?

–Ehh… me falta mejorar con el driver. Esta semana no he pegado del todo mal. Estaba más o menos contento y justo ha aparecido el fallo en el hoyo 17, donde he tirado la bola fuera por la derecha. No había pregado ninguno o casi ninguno malo y ha vuelto a aparecer en el peor momento.

Me falta ir un poco más derecho, y eso es lo que estoy mejorando.

–¿Te has marcado objetivos en el golf?

–Como todos, quiero acabar jugando en el Tour Europeo algún día. Sé que es difícil, que tengo muchas cosas que mejorar, que me queda mucho trabajo, pero, hombre, si empiezas poniéndote un objetivo bajo, mal vamos.

Sé que hay mucha gente pretendiendo lo mismo, que son muy buenos, que entrenan mucho, pero al final todo consiste en entrenar más que el resto.

–Estás estudiando Derecho. ¿Te has propuesto acabar la carrera?

–Está mal que yo lo diga, pero soy bastante buen estudiante. Lo que pasa es que desde hace un par de años tengo la carrera un poco abandonada y me he centrado más en el golf. Sé que tengo que acabarla, no sé si la acabaré a distancia o cómo, pero sé que tengo que hacerlo, independientemente de que me vaya bien o mal en el golf.

–Supongo que te perguntarán mucho por esto: ¿Te condicional mucho el apellido a la hora de jugar, te pesa, piensas o no en esto?

–No me pesa, si acaso me puede abrir alguna puerta, proporcionándome alguna invitación o algo así. Pero presión no tengo. Lo que hizo mi padre fue increíble, y casi te diría que irrepetible… Hombre, alguien lo hará algún día, pero su carrera es algo muy difícil de igualar, y o estoy a mucha distancia.

Además, él tenía un juego muy distinto al del resto.

Mi apellido no me presiona absolutamente nada, sé quien era él, quién soy yo, y sólo trato de disfrutar y ganarme la vida con lo que me gusta.

–¿Qué consejos te dio par el golf y para la vida?

–Para el golf, muchos. Me quedo con su insistencia en que hay que trabajar mucho, que el talento solo no vale. Que siempre hay que esforzarse mucho, más que el de al lado, y que dentro de una técnica refinada hay que intentar jugar con mucha naturalidad.

Para la vida lo más importante que me inculcó es que siempre hay que ser una persona honrada.

–¿Qué es lo que más admirabas de tu padre?... Disculpa que te pregunte sobre él, pero…

–No, no (me interrumpe), no me molesta en absoluto. Al contrario, me gusta hablar de él. ¿Qué es lo que mas admiraba de él? Pues quizá el hecho de que llegase de la nada a ser el mejor jugador del mundo. Es algo impresionante. Yo no tuve la suerte de verlo porque en su mejor época yo no había nacido, y en los 90 ya mi padre no estaba en su mejor forma, aunque siguiera jugando bien.

No tuve la suerte de haberle visto ganar un torneo, aunque en vídeo sí: me los he visto todos y muchas veces.

También lo admiré mucho durante su enfermedad por su entereza, fuerza y forma de luchar contra la enfermedad. Siempre fue un luchador, y yo trato de seguir su ejemplo de trabajo y capacidad de sacrificio...

–Me decías antes que te gusta mucho el fútbol, que eres un gran seguidor del BarÇa…

–Sí, aunque cada vez menos... me estoy quitando (ironiza). He sido muy del BarÇa y muy futbolero, pero, como le he dicho a algún amigo, he visto a mi equipo ganar seis títulos en un año... a la selección española dos Eurocopas y un Mundial... Lo he visto todo. Me sigue gustando el fútbol, pero ya no soy tan fanático.