Es Villa Padierna uno de los resorts de golf más espectaculares del sur de Europa y de todo el Mediterráneo. Sus tres campos de 18 hoyos, academia de golf, racquet club, beach club, wellness center y su lujoso hotel de cinco estrellas, donde se alojó la que fuera primera dama de Estados Unidos Michelle Obama, es ciertamente un rival difícil no ya de batir, sino siquiera de igualar. El exquisito gusto que rezuma el elegante hotel, decorado con innumerables obras de arte, casa a la perfección con el paisaje evocador de la Toscana que lo circunda.

Una de las últimas incorporaciones al equipo directivo del resort, en calidad de director de Operaciones de Villa Padierna Golf Club, es Pedro Morán. Curiosamente, empezó su andadura profesional en el mundo del golf, hace diez años, en este mismo club, posteriormente estuvo dos años en el campo de golf  La Almarza, de 27 hoyos en Ávila, y luego trabajó durante siete años en Green Mowers, distribuidor entre otras de las marcas E-Z-GO y Jacobsen para toda España.

–¿Ha cambiado mucho Villa Padierna Golf Club desde que trabajó aquí por primera vez, hace duna década?

–Pues sí. Entonces había dos campos y ahora son tres, y además hay otras nuevas instalaciones. Aunque sigue siendo un club comercial, ahora tiene más socios y más ambiente social. He encontrado un proyecto ilusionante y un resort espectacular. Somos el único resort de la Costa del Sol con tres campos de golf, entre ellos el único executive de la zona, un hotel de cinco estrellas y un beach club, aparte de la academia de golf y el racquet club, medical wellness y spa… Y luego tenemos también en la provincia Las Termas de Carratraca, que es otro hotel de cinco estrellas.

–¿Hay alguna novedad en lo que respecta a la faceta de golf del resort para este año?

–Recientemente se ha hecho un trabajo muy importante de poda y limpieza en el entorno de los hoyos de alrededor del lago de Flamingos para que se vea mucho más esta gran lámina de agua. Por otra parte, estamos dando más servicio al cliente, más valor añadido, proporcionando agua, fruta, tees, toallitas… queremos que note que está obteniendo un gran servicio y que repita su visita, fidelizarlo.

–¿Cómo describiría sintéticamente los campos de golf de Villa Padierna?

–Nuestros tres campos son muy diferentes. Flamingos se inauguró en 2001 lo diseñó Antonio García Garrido, que es un diseñador famoso de la Costa del Sol, y se podría calificar como un campo amable, un recorrido muy comercial, para todo tipo de jugadores.

Tramores es un executive de 18 hoyos que es un campo muy bueno para la gente que se inicia y para los niños. Es par 63 con un par 5, seis pares 4 y el resto son pares 3. Se abrió en 2003 siendo un campo de 9 hoyos y luego se amplió a 18. El diseñador es nuestro greenkeeper, Cristóbal Guerrero.

Alferini, también diseñado por Cristóbal Guerrero, se abrió en 2008 y es nuestro campo estrella, nuestro campo de alta competición. Como dicen los ingleses, es más challenging, más duro, más campo.

Podemos decir que, venga quien venga, en Villa Padierna tenemos el campo que se adapta a sus necesidades y donde va a disfrutar.

–¿Qué clientela predomina en el resort?

–En primavera y otoño predominan los extranjeros que vienen a jugar al golf, principalmente británicos, durante el verano viene un poco más la clientela nacional y en invierno hay una mezcla de nacionalidades.

–¿Hay en el horizonte algún proyecto para albergar una competición de profesionales en Villa Padierna?

–Tenemos en mente hacer en Alferini algún torneo profesional de alto nivel, pero todavía no podemos adelantar nada. Es un campo de alta competición y lo pretendemos llevar a cabo.

–El resort suele ser además en verano sede de bastantes torneos amateur…

–Sí, y vamos a seguir en la misma línea. Están nuestros torneos tradicionales, como pueden ser el Condesa de Villapadierna, que cumple este año su decimoquinta edición, o el Andalucía Golf Challenge, y luego tenemos un torneo muy especial para nosotros que es el Cuadrangular, un campeonato donde compiten socios de Neguri, Puerta de Hierro, La Moraleja y Villa Padierna. En su momento comenzó como una Ryder Cup entre La Moraleja y Puerta de Hierro, en la que yo tuve la suerte de participar, y luego se convirtió en el actual Cuadrangular, que este año celebra su décima edición. Tendremos además alguna sorpresa más para este verano, pero aún no puedo adelantar nada la respecto.

FIGURA CLAVE

Morán considera importante destacar la labor del greenkeeper del club, Cristóbal Guerrero, ”porque lleva prácticamente toda su vida trabajando en el club y es la persona que mejor conoce nuestros campos. Aparte de ser el diseñador de Alferini y Tramores, ha construido los tres campos de golf. Creo que pocos clubes tienen a una persona que tenga un conocimiento tan profundo de sus campos y sepa combinarlos tan bien con su entorno”.

Respecto a los planes de futuro de Villa Padierna Golf Club, el director de Operaciones del resort, dice que ”la idea a medio y largo plazo es generar más socios y, en la medida de lo posible, ser un club más mixto, donde compaginemos socios con visitantes de green fee”. Para ello se potenciarán la vida y los eventos sociales con el objetivo de “hacer más club social a Villa Padierna”. El socio tiene acceso a todas las instalaciones del resort, a los tres campos de golf, al racquet y al beach club, descuentos en el spa… ”Realmente ofrecemos un abanico de productos y servicios que yo creo que no ofrece ningún otro club de golf de la Costa del Sol”, concluye Morán.