El malagueño Guadalhorce Club de Golf se encuentra, sin duda, en el mejor momento de sus veintiséis años de historia. El campo fue diseñado a finales de los años ochenta por un arquitecto finlandés, Kosti Kuronen, que trazó su recorrido en una vieja finca agrícola situada junto al río que le da nombre.

Los nueve primeros hoyos son un típico "parkland" que discurren por suaves colinas, sin mucha vegetación y sin lagos. Los nueve segundos, por contra, son más movidos, con más desniveles y el agua entrando en juego en varios hoyos.

Hace unos años Miguel Ángel Jiménez rediseñó totalmente el campo, por lo que se puede afirmar que este es el único recorrido en la Costa del Sol del gran jugador malagueño.

"Estamos en el mejor momento de nuestra historia" -asegura Salvador Álvarez, director del club- por una razón muy sencilla, porque cuando se hizo este club no se "acabó" como estaba previsto, tanto en lo que respecta al campo como a la casa club, un viejo caserón del SigloXVIII. Hubo que adaptarse al presupuesto y se hizo lo que se pudo".

"En años posteriores" -añade Álvarez- "con el esfuerzo de los socios, los directivos y el personal, hemos ido arreglando y haciendo lo que no se pudo hacer en un principio, por eso estamos llegando a un momento óptimo. Si comparamos fotos de 1990 y de ahora podemos apreciar la diferencia abismal de campo. Lo que ocurre es que estamos llegando a este "punto dulce" en un momento en el que, por el paso del tiempo, tenemos que empezar a modificar y reformar cosas... Hemos conseguido llegar, en muchos aspectos, a un nivel muy alto, sobre todo después de la reforma estructural que hizo Miguel Ángel Jiménez hace unos años"

"Podría decirse" -concluye el director del club- si hubiese clasificación de los campos, que Guadalhorce Club de Golf ha subido de categoría".